Читать книгу El Tigre del Subte . Y otros cuentos del encierro онлайн
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A partir de ese momento de infancia, escribir me convirtió en un ser alado. Cada vez que quiero escapar, tomo lápiz y papel para elevarme entre lo real y lo imaginario, para descubrir que nunca hay límites.
Y ahora en este, mi encierro, tengo otras libertades. No sufro cuando estoy con mis historias. La casa da vueltas y los muros desaparecen. Este encierro me hizo libre.
LAS CARTAS DEL TREN
Nunca salió de la estación del tren. Su padre se encargaba de la venta de boletos y de la limpieza de los vagones. A Paolo, con su corta edad, le parecía un privilegio vivir en un pueblo cabecera de estación. Era lo más emocionante que podía pasar en un pequeño lugar perdido en el medio de la nada.
Cuando el tren llegaba o salía, Paolo se comportaba igual que los perros: corría. Sabía todos los horarios, y siempre lo esperaba ansiosamente para correr. En el momento en que asomaba la formación, corría delante de ella como si el tren lo persiguiera, y cuando partía, corría detrás esperando que se perdiera en el horizonte, hasta que sus delgadas piernas no lo pudieran sostener más.